Hoy os presento una historia especial, de amor incondicional y una fuerza arrolladora, hoy María Virginia Rubio nos cuenta su historia de amor, un amor que marcaría el resto de su día a día. María Virginia es la reina del SEO y de la analítica web, lo sabe todo sobre esa palabra que a mi, solo de escucharla me causa escalofríos, y logra explicarte sus fundamentos como si te contara una historia de amor.
Ella lo cuenta tal cual, como si de una historia de amor a primera vista se tratara, cuando supo de que iba el seo ya no quiso dedicarse a otra cosa. puedes visitar su web y conocerla un poco más. Hoy te traigo una de las historias más personales de todas, trata de amor, perseverancia, constancia, fe y familias.
Cuando Raquel me invito a contar sobre las mujeres de mi familia me habían ayudado con mi emprendimiento, bueno…. Ups, aquí tenemos un problema. Y es que a quien siempre he identificado que me ha ayudado con mi emprendimiento por más que ya no este en este mundo es mi abuelo. Mi abuelo que siempre trabajo en lo que quiso, que cambiaba de trabajo simplemente por el hecho de sentirse más a gusto con lo que hacía y obvio también por mejorar. Siempre recuerdo cuando mi abuela me lo contaba, algo así como una rebeldía de su parte! Ja ja
Pero tenía la respuesta en la punta de mi nariz… me pasa que hasta que no escribo las cosas como que no las termino de bajar a tierra y comenzando a escribir me di cuenta que no se trata únicamente de quienes te ayudan a montar tu emprendimiento sino de todas las personas que en el camino te van apoyando para poder mantenerlo que a veces es lo que más cuesta, mantener la fuerza, no decaer cuando alguna pieza se quiebra. Esas personas que talvez no entienden lo que haces pero te han enseñado a que hay que luchar por lo que uno quiere. Esas personas que talvez no te ayudan directamente pero de alguna manera te dejan una enseñanza que en algún momento aplicarás también en tu emprendimiento.
Para contarles sobre esas mujeres importantes de mi vida, resumí en 3 aspectos: el valor de la familia, el amor y el tomar desafíos.
Hoy tengo 40 años, hasta hace 10 años aproximadamente viví con el lujo de tener junto a mí a mis abuelos, los dos por parte de mi padre y mi abuela por parte de mi mama, mi otro abuelo falleció cuando yo tenía 10 años. Es decir tenía a todos y prácticamente la vida no me había quitado nada y nunca había experimentado eso en el núcleo cercano y aunque como en fantasía… pero tal vez pensaba que nunca me tocaría.
Dejé de hacer muchas cosas por mi trabajo, no compartía una salida familiar porque tenía que entregar tal cosa, o no iba a tal lado porque mejor adelantaba tal otra y así con todo, me perdí cumpleaños, reuniones familiares, perdí momentos y recuerdos que ahora podría tener…
Llega un momento en el que te das cuenta del quiebre, de que los años pasan y ya no somos las mismas personas físicamente, el paso del tiempo va dejando sus huellas…
En 2012 mi mamá se enfermó de cáncer de colón, fue un golpe de realidad para mi fantasía y la posibilidad de perder a la persona más importante de mi vida. A partir de ahí me di cuenta de que no importa que mi madre me rezongue porque no hice tal u otra cosa y si, también siento que a veces no entiende ni mi emprendimiento ni mi falta de tiempo, ni porque mi casa no está perfectamente ordenada, pero no me importa porque eso no es lo importante, lo importante es que tengo a mi madre conmigo y puedo disfrutarla!
Mi mamá mejoro y esta re bien gracias a Dios, pero a mí me dio una lección importante, la importancia de pasar tiempo y compartir los momentos importantes con ella, generar recuerdos y vivir momentos.
En 2013 quede embarazada, una alegría increíble para toda la familia y obvio para mi! Primer nieto, primer sobrino, primer hijo! Un embarazo en el que no se decir que es una nausea ni una contracción, no tengo idea! Todo súper hasta que empecé a tener algunos problemas con la presión en la semana 27. Luego de 3 internaciones, en la semana 32 y al borde de todo, nació Albertina con 1 kilo de peso! Un kilito de arroz como dice mi padre.
Alber nació llorando de una manera que no se imaginan, hiper chiquirrina pero como dijo el médico, muy vigorosa! Me la mostraron un segundo porque inmediatamente se fue cuidados intensivos donde estuvimos un mes aproximandamente. Pasamos allí una navidad…
Cuando me pude levantar a las horas para ir a verla, Dios mío! Era tan chiquita y no la podía agarrar! Solo tocarla a través de la incubadora. Necesitaba que alguien me dijera que iba a estar bien, pero había que esperar el correr de las horas… Cada día era ver cuando había aumentado de peso, 10 gramos, bajaba 3 aumentaba 20! Decidí que lo que podía hacer era estar allí con ella, así que me pase allí metida todas las horas que me permitían que por suerte eran bastantes. No podía agarrarla pero le acariciaba los piecitos, la espaldita, la agarraba de su manito y ella respondía! Día tras día fue evolucionando hasta que un día me dijeron “capaz que hoy de noche te la damos a upa…” no sucedió esa noche pero si a los pocos días! La sacaron de la incubadora y entre montones de cables me la dieron a upa, no puedo describir lo que fue! La emoción más grande de mi vida, al fin tenía a mi bebé en brazos! La metía dentro de mi camisón (método canguro para bebés prematuros) y allí pasábamos horas mimoseando y a ella le encantaba.
Soy una convencida de que a mi bebé el amor es lo que la ayudó a salir, a avanzar! Y ese fue otro golpe de realidad, hoy ella es lo más importante para mí, es mi prioridad. Yo trabajo en casa, la cuido y ella va conmigo muchas veces a reuniones de trabajo, está presente en las reuniones virtuales que hago con mis clientes y pueden dar fe de ello, y si, muchas veces ella está cantando o jugando y se la escucha, pero sabes qué? No me importa! Soy feliz con que así sea! Y a quien no le guste que no me contrate, porque soy madre y me ocupo yo de mi hija y para mí es un orgullo enorme y por ella hago lo que sea!
En 2016 me uní por casualidad a un grupo en Facebook y me empezaron a llegar algunos mails en relación al mismo pero pasaron algunos meses hasta que conecté con él. Fue un día que me llega un mail de su creadora diciendo que Google había dejado a su web fuera de los resultados de búsqueda. Se imaginan que un mail de esas características, me tocó el corazón realmente. Me encanta cuando puedo ayudar a alguien, me hace sentir muy feliz, pero en esta ocasión era diferente. Creo que nunca le había respondido un news a una persona pública, con una comunidad y demás!
Respondí el mail intuitivamente diciéndole que si quería podía revisar la web a ver si encontraba cuál podría ser el problema, pero no le podía dar al botón de enviar!! Tuve un buen rato el correo ahí y mi impostora me decía no lo mandes! Pero yo lo quería enviar, porque me parecía que realmente podría ayudar, así que pensé, que más malo puede pasar que no lea mi mail, o diga esta que se piensa y no me responda! Así que lo mande! y para mi sorpresa hubo respuesta! A partir de que me anime a enviar ese mail, mi vida dio un giro increíble! Conocí a Paula y a través de ella a un grupo increíble de mujeres que hoy puedo decir que son mis amigas, que aunque lejos siempre están cerca y han sido el empuje que siempre en algún punto del camino necesitamos para seguir o redirigir la ruta! Para mi enviar ese mail fue un desafío, pero aprendí que tenemos que darle click al botón de enviar muchas veces y animarnos a tomar esos desafíos, porque nada puede ser peor que no intentarlo!
En estos días tan especiales dónde todo se nos remueve, donde nos replanteamos nuestra vida, el emprendimiento… decirte tres cosas
Valora lo que tienes, cuídalo, pasa momentos con tu familia y genera recuerdos.
El amor mueve montañas.
Toma desafíos, no te quedes pensando en que hubiera sido si…, hazlo, no hay nada peor que no intentarlo!
