Contrato va, contrato viene

El contrato como herramienta

Depende de que mundo provengas verás con mejores ojos la utilización de un contrato para las relaciones comerciales. Igual no lo has utilizado nunca, o no tienes costumbre de realizarlo.
Mi experiencia dice que siempre es bueno tener uno a mano, aunque el día a día a veces nos hace olvidarlo en un segundo plano. Lo reconozco, a mi a veces se me olvida presentarlo, nos ponemos a trabajar, comenzamos y siempre hay muchas dudas, muchas conversaciones y el contrato se queda en el fondo del cajón. Pero que a mi me pase no es excusa para que te pase a ti, así que hoy vamos a establecer un protocolo para que nos resulte fácil dejarlo todo claro desde el principio.
Así, para estar preparados, tendremos que pensar que cosas queremos que queden claras con nuestros clientes, lo más fácil es pensar en el objeto del contrato, aquello que solemos hacer o vender, el precio, el plazo de ejecución, la forma de pago y poco más.
Las condiciones generales no suelen ser problema, lo tenemos bastante claro, aunque no hay cómo ponerlo por escrito para darte cuenta de todo lo que debes depurar tu concepto. Tener claro nosotros lo que ofrecemos, cómo lo ofrecemos, es todo un arte que requiere de un ejercicio brutal de honestidad y observación.
Así que busca un rincón tranquilo de casa, ponte cómodo, coge tu libreta “estratégica” y comienza a apuntar todo lo que quiere transmitir a tu cliente. Así piensa en lo que vendes, si vendes mas de una cosa, tómate tu tiempo, no quieras ir demasiado rápido. Hay veces que queremos ir demasiado rápido y no es bueno para aclarar nuestra mente.
Si ya sabes que es lo que vendes, ahora toca la hora de pensar cómo lo vamos a hacer, piénsalo de la forma más sencilla que puedas e intenta escribirlo, los pasos necesarios para poder desarrollar tu trabajo.
Por ejemplo, yo si tuviera que escribir mi contrato para mi servicio de Protección de datos, tendría en cuenta lo siguiente:
1.- Que una vez yo te envío mi mail de bienvenida con el cuestionario, eres tú quién debe dar el siguiente paso, sin tus respuesta yo no voy a poder continuar.
2.- Que si tardas demasiado en contestar, igual yo luego no puedo prestarte el servicio tan rápido como me gustaría.
3.- Que hay un plazo máximo para desarrollar este trabajo y que depende de tus respuestas el poder hacerlo.
4.- Que una vez pasado ese plazo máximo sin que tu hayas hecho tu parte del trabajo, el contrato se resolverá y me liberarás de hacerlo.
Estos son algunos ejemplos, pero las posibilidades son infinitas, solo es cuestión de ir anotando en la lista todo lo que te parece importante.
Y ahora viene la gran pregunta, la importante de verdad.

¿Qué ventajas tiene formalizar un contrato?

Yo creo que son muchas y variadas, pero para hacerlo mucho más fácil lo vamos a dejar en diez súper ventajas, ¿te parece?
1.- La principal ventaja es que todo consta por escrito, no depende de la memoria.
2.- Al estar escrito, nos ha obligado a pensar en situaciones concretas, que de otra manera no hubiéramos pensado.
3.- Todas las partes hablan el mismo idioma, y hay transparencia, lo que hace que se transmita profesionalidad y confianza.
4.- Las condiciones pactadas están claras,.
5.- Todos sabemos cuales son nuestras obligaciones, tú y tu cliente.
6.- En caso de que las cosas se tuerzan, sabremos a que atenernos, porque ya lo hemos pensado antes.
7.- Puedes personalizar todo lo que necesites el contrato, haciendo uno casi a medida para cada uno de tus clientes.
8.- Tus colaboradores saben a que atenerse ya que consta en el contrato.
9.- Documenta las transacciones comerciales y profesionales, pudiendo ser prueba de ello cuando lo necesites.
10.- Te permite dormir tranquilo.
Y sobre todo, dotan a tu negocio de un alto grado de profesionalidad. No hay nada como sentirse seguro al contratar con alguien, al menos las primeras veces, cuando casi no te conocen o no han trabajado contigo antes. ¿Te apuntas a la moda de documentar tus relaciones comerciales?
Si tu mundo no es el de los servicios, igual crees que esto tampoco tiene que ver contigo, pero hazme caso y haz el ejercicio, todo lo que hoy desarrollamos te servirá para completar tus condiciones generales de contratación, que si o si deberás tener en tu web, así que aprovecha y haz el trabajo, que luego ya tendrás mucho más desarrollado.

Otros Artículos

Suscríbete a nuestra Newsletter

Los datos personales que proporciones al suscribirte, serán tratados conforme la normativa vigente de Protección de Datos (LOPD y RGPD) y gestionados en un fichero privado por Raquel Blanco Martí, responsable de Blanco Legal. La finalidad de la recogida y tratamiento de los datos, es para enviarte la información solicitada, así como mis publicaciones, promociones y contenidos exclusivos para suscriptores. La legitimación se realiza a través de tu consentimiento expreso. Los datos que facilites, estarán ubicados en los servidores de Active Campaigne, nuestro proveedor de email marketing, a través de su empresa Active Campaigne, ubicada en EEUU y acogida al EU Privacy shield. Puedes ver la política de privacidad de Active Campaigne. No introducir tus datos, tendrá como consecuencia el no poder atender tu solicitud. En ningún caso tus datos serán cedidos a terceras personas. Puedes ejercer tus derechos de rectificación, oposición y/o eliminación de tus datos, enviando un email a Dirección de correo electrónico consulta más información en nuestra Política de Privacidad.